Comprender la importancia de la labranza

La labranza es el proceso de descompactar y airear el suelo, normalmente como preparación para la plantación de semillas, plántulas o esquejes. Labrar el suelo antes de la plantación proporciona a la planta las mejores condiciones para prosperar. 

La labranza mejora el estado y la calidad del suelo al romper la corteza del suelo y aumentar la porosidad, lo que facilita la infiltración del agua en el suelo. Además aumenta la temperatura del suelo, lo que favorece el crecimiento. 

Labrar el suelo también ayuda al mantenimiento de los lechos de cultivo. Mantiene a raya las malas hierbas al perturbar las semillas, enterrándolas a demasiada profundidad o exponiéndolas a los pesticidas en la superficie. Y puede utilizarse para mitigar la erosión mediante una práctica conocida como labranza en contorno, en la que se utilizan canales de agua de forma estratégica para controlar la escorrentía y evitar que el suelo sea arrastrado.

Existen dos tipos principales de labranza: labranza primaria y secundaria. 

La labranza primaria se realiza mediante prácticas como el arado. Implica un volteo profundo del suelo. Se hace para eliminar las malas hierbas, airear el suelo y permitir que el agua penetre más fácilmente en lecho de cultivo. En algunos casos la labranza primaria también se utiliza para enterrar los residuos no deseados que se han acumulado en la parte superior del suelo. La labranza primaria por sí sola no es suficiente para preparar completamente la siembra. Deja atrás grandes terrones de tierra que aún hay que desmenuzar. 

La labranza secundaria consiste en remover el suelo a menor profundidad que la labranza primaria. Se utiliza para romper los terrones, nivelar las superficies, desplazar los residuos y controlar las malas hierbas. La labranza secundaria suele ser el último paso en la preparación de los lechos de cultivo para la siembra.

Hay muchas herramientas y máquinas diferentes que se utilizan para labrar la tierra. Cada una tiene sus propias ventajas y desventajas. La elección del mejor sistema de labranza para el trabajo en cuestión depende de factores como el tipo de suelo y los cultivos que se van a plantar. La decisión también se ve afectada por la disposición del terreno y las preferencias personales.

Las máquinas de labranza más utilizada en la agricultura comercial son los arados, las gradas de discos, los subsoladores y los cultivadores. Estas máquinas deben mantenerse en perfecto estado para garantizar que funcionen de la forma más segura y eficiente posible. 

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El carburo se crea combinando carbono con metales como el tungsteno y el cobalto. Así se forman aleaciones superduras que suelen ser más resistentes y duran más que el acero. Si buscas una solución de labranza a largo plazo, las herramientas de carburo pueden ser la opción perfecta. El carburo ofrece muchas ventajas en comparación con el acero tradicional:

• Larga vida útil – Las herramientas de carburo ofrecen una vida útil sustancialmente más larga que sus equivalentes de acero.
• Ligero – El carburo es hasta un 30% más ligero que el acero. Esto supone un menor esfuerzo para la máquina, lo que ayuda a prolongar su vida útil.
• Duradero – Los grados de carburo de alta resistencia son más resistentes al desgaste que los grados de acero de alta resistencia.
• Versátil – A diferencia de acero, el carburo mantiene su dureza a altas temperaturas. Esto significa que las herramientas de carburo pueden utilizarse a velocidades más altas durante más tiempo sin que se reduzca su rendimiento.

La labranza siempre ha sido y será una parte integral de la agricultura. El uso de los sistemas de labranza más adecuados puede ahorrar a los agricultores mucho tiempo y dinero.

BEPCO tiene una amplia gama de productos para sistemas de labranza:

• Recambios para el arado: reja, vertedera, talón, cuchilla para arado, cuña de resguardador, cuchilla, reja de raseta, vertedera de raseta, vertedera de listones
• Recambios de cultivadores: púas de cultivo, spoiler
• Recambios de grada de toma de fuerza: dientes de rastra
• Recambios de carburo: dientes de rastra, alas, puntas para cuchilla, reja de arado, reja peladora

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